Dos visitas a Alemania.

Enero 2011 y marzo 2010.

Por motivos familiares he visitado recientemente Alemania un par de veces. No son, por tanto, viajes de turismo, pero siempre ha habido un rato para conocer algunas de las ciudades más próximas. Mannheim, Heidelberg y Speyer, situadas en el suroeste alemán, no demasiado lejos de la frontera con Francia bien merecieron una visita, y esperemos que más.

Heidelberg, a orillas del Neckar, y Speyer, a orillas del Rin, son dos ciudades de interés turístico, sobre todo la primera. Mannheim, que se encuentra en la unión de ambos ríos, no es una ciudad tan atractiva aunque cuenta con un conocido parque, el Luisenpark, que visité rápidamente el pasado lunes.

Por proximidad, la localidad que más he pateado ha sido Speyer. Junto a su espectacular catedral hay unos jardines donde se puede pasar un buen rato viendo pajarillos e incluso algún ratonero (Buteo buteo) que rápidamente es perseguido por las cornejas (Corvus corone). Los carboneros (Parus major), herrerillos (Cyanistes caeruleus) y mirlos (Turdus merula) son abundantes. Además este martes pude ver petirrojos (Erithacus rubecula), torcaces (Columba palumbus), verderones (Carduelis chloris), jilgueros (Carduelis carduelis), pinzones vulgares (Fringilla coelebs), picogordo (Coccothraustes coccothraustes), trepador azul (Sitta europaea), pico picapinos (Dendrocopos major) y una pareja de Cotorras de Kramer (Psittacula krameri), especie originaria de África Central y Asia.

Catedral de Speyer. Los pajarillos de la lista anterior se vieron en esos árboles.

A mediados de marzo del año pasado, en este mismo punto también se veían mitos (Aegithalos caudatus) y algunos gorriones comunes (Passer domesticus) -este año no vi ningún gorrión es Speyer-. También se veían con facilidad zorzales comunes (Turdus philomelos) en este parquecillo y en otras zonas verdes de la localidad, junto a Escribano Cerillo (Emberiza citrinella), también observado este año, y estorninos pintos (Sturnus vulgaris). Lo más sorprendente fue encontrarme con un grupo de cuatro corzos (Capreolus capreolus) en una zona verde rodeada de grandes supermercados.

Speyer cuenta con algunos espacios naturales de interés

La ribera del Rin presenta algunos bosques impresionantes, donde se mantienen en pie numerosos árboles de gran porte, viejísimos chopos, muchos decrépitos, magníficas ruinas llenas de agujeros y grandes hongos yesqueros, y donde la madera muerta, los troncos caídos y ramas partidas, son parte importante de ese paisaje aparentemente desordenado. En marzo pude visitar uno de estos bosques, no muy lejos de Speyer. Tenía la esperanza de ver Picamaderos Negro (Dryocopus martius). Al amanecer, nada más bajar del coche escucho su potente canto y también tamborileos. Le veo en lo alto de un chopo partido, fueron más de veinte minutos de emocionante observación.

No tengo ninguna foto del picamaderos, pero sí de este tocón agujereado, con grandes astillas en el suelo, clara señal de su presencia.

Se veían con facilidad otros pajarillos forestales, incluyendo zorzales alirrojos (Turdus iliacus) y alguna pareja de Carbonero Palustre (Poecile palustris), pero sin duda otra de las estrellas de la jornada fue el Pico Mediano (Dendrocopos medius) que se dejó ver a placer en un par de ocasiones.

Pico Mediano (Dendrocopos medius)

En el Rin y en pequeñas lagunas de la orilla saqué un pequeño listado de aves acuáticas: Cisne vulgar (Cygnus olor), Focha común (Fulica atra), Zampullín común (Tachybaptus ruficollis), Ánade azulón (Anas platyrhynchos), Ánade friso (Anas strepera), Porrón moñudo (Aythya fuligula), Porrón europeo (Aythya ferina) y el precioso Goldeneye o Porrón osculado (Bucephala clangula). Estos últimos fueron una sorpresa para mí, pero al parecer son invernantes habituales. Por desgracia guardaban cierta distancia y eché en falta el telescopio. A los porrones osculados volví a verlos esta semana, alimentándose en un par de puntos del Rin.

Goldeneye o Porrón osculado (Bucephala clangula)
Cisne vulgar (Cygnus olor)

También se veía algún cormorán grande (Phalacrocorax carbo) y una cigüeña blanca (Ciconia ciconia), sin embargo no recuerdo haber visto ninguna garza, ni el pasado año ni este.

Este año nos acercamos al Luisenpark, en Mannheim. No tenía muy claro lo que me iba a encontrar, imaginaba que grandes estanques con aves acuáticas como así fue, pero no un pequeño zoo donde podías ver algunas aves realmente llamativas. Desconozco cual es el origen de estas, al menos en parte daba la impresión de que podían tratarse de aves recuperadas, tal vez incautadas o entregadas por sus propietarios. Una colección de fauna, de aves sobre todo en este caso, dentro de la legalidad puede ser legítima y puede estar justificada con fines de educación, de recuperación de ejemplares en mal estado o de mantenimiento, en las mejores condiciones posibles, de aquellas que no pueden volver a la naturaleza, pero hay algo que no entiendo. Un par de días antes, desde la carretera, en unas tierras de cultivo me sorprendió ver dos parejas de Gansos del Nilo (Alopochen aegyptiaca). Mas tarde pensando en el Luisenpark, empecé a sospechar cual podría ser su procedencia, aunque lo mismo estoy equivocado.

Gansos del Nilo (Alopochen aegyptiaca)

En el parque vimos varias parejas y al menos otra fuera del parque, en el río Neckar. Las especies introducidas son una de la mayores amenazas para la fauna y los ecosistemas en este planeta, aunque no todas las introducciones son igual de nefastas, pero ante el riesgo que existe lo mejor es prevenir. Ya que hablamos de especies introducidas, en Mannheim, no lejos del Luisenpark también observé un bando de cotorras, luego en el parque identifiqué alguna Cotorra de Kramer volando libremente. Además, al menos en el Rin, es posible ver ratas almizcleras (Ondatra zibethicus).

Pato Joyuyo (Aix sponsa) hembra.
Pato Joyuyo (Aix sponsa) macho.
Alcaraván Peruano (Burhinus superciliaris)
Alcaraván Peruano (Burhinus superciliaris)
Cerceta Castaña (Anas castanea)
Cárabo Lapón (Strix nebulosa)
Serreta Capuchona (Mergus cucullatus)

El parque también es conocido por la variedad de especies vegetales que contiene. Me llamaron la atención unos pies de alcornoque (Quercus suber) recién transplantados y sólidamente entutorados, ya suficientemente grandes, imagino que con la esperanza de que así aguanten los fríos de por allí. Por supuesto, el parque también es visitado por un buen número de aves silvestres. Los gorriones comunes (Passer domesticus) eran abundantes y estaban muy animados, no les faltaba comida en las pajareras -también vi alguno en la ciudad-. En un par de ocasiones nos encontramos con un bando de lúganos (Carduelis spinus) que comían en alisos y otros arbolillos, a veces muy confiados. De nuevo la estrella de la mañana fue un pico mediano (Dendrocopos medius) que pudimos observar a corta distancia.

Estoy preparando un vídeo para dejar testimonio audiovisual, parcial, de lo que aquí cuento, espero que podáis verlo en poco tiempo. (PD. Ya tenéis el vídeo en la siguiente entrada)

No hay comentarios:

Publicar un comentario